Dicen que un escritor no puede dejar de escribir. Igual que respirar, comer y beber. Y que para él, preguntarse por qué escribir es como preguntarse por qué vivir.
Yo ya hace varios años que escribo.
Escribo para descubrir quien soy y asi vivir mejor, escribo para que los demás se reconozcan en mis textos y así poder conocerlos mejor.
Escribo para hacer viajes interiores que me liberan. Viajes que se abren al mundo.
¿O es más bien por miedo a vivir?
¿Un refugio fácil, poniendo sobre papel las acciones, que no tengo el valor de poner en mi vida?
Me pregunto y repregunto...
Y cuanto más escribo, más me pregunto por qué escribo.
Siempre olvidando preguntarme, por qué me hago esa pregunta.
"Escritor no hay destino, se hace destino al contar".
"Escritor no hay destino, se hace destino al contar".
CS.
Descubrí de casualidad tu blog, y ahora cada cosa que leo me recuerda a algo que he vivido últimamente o hace ya algún tiempo... No dejes de escribir sobre vos, porque es cuando más desnudás tu alma... y cuando más disfruto de leerte.
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